martes, 24 de enero de 2012

Exposición, Trnasición de la URSS a la Federación de Rusia


La transición que dio lugar a lo que conocemos como Rusia, vino de la mano de lo que llamamos Perestroika. Dicho fenómeno se debió al aumento de la producción por parte de la maquinaria soviética y que paralelamente vio como descendía el número de bienes esenciales para la población. Los compañeros señalaron algunos aspectos internos que llevaron a tal situación y que ahora son más destacables tras el establecimiento de la Federación rusa:

El primero de ellos lo encontramos en la sanidad: la principal causa del deterioro de su calidad se reflejó en la disminución del número de construcciones de infraestructuras tales como hospitales, ambulatorios o demás centros sanitarios.

La siguiente característica, no menos importante como gran suceso social, fue el de la alimentación. Esta necesidad estuvo cubierta durante la existencia de la URSS aunque en la actualidad su calidad ha disminuido lentamente, dándose mayor prioridad a alimentos como el pan o las patatas.

Otro aspecto destacable fue el de la calidad de vida, punto nada desdeñable por la pérdida de capacidad adquisitiva. Entre otras cosas dicho fenómeno se debe al papel que juega la industria: pasó de ser una economía planificada a una economía de mercado. Este aspecto es fundamental para entender el retroceso socioeconómico de la actual federación, ya que si antes estaba “planificada” para atender las necesidades del pueblo ahora pasa a estar controlada en función del mercado, aquellos que poseen los medios de producción, es decir, los capitalistas.

Finalmente los compañeros nos hicieron un resumen del papel desempeñado por la URSS tras la Segunda Guerra Mundial en confrontación con los Estado Unidos. Si bien ese periodo de conocida Guerra fría parece haber terminado, en la actualidad el papel que sigue jugando el pueblo ruso no es para nada insignificante tal y como –según nos explicaron- muestran países entre los que se encuentra Rusia, los BRIC.

Como conclusión de la exposición parece haber quedado claro que para el actual pueblo ruso la desaparición de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas ha supuesto un retroceso en el nivel de vida, que les ha hecho ver como la Federación rusa ha traído riqueza nada más que para nos pocos.

viernes, 20 de enero de 2012

Ciencia y método. Roberto Carballo

El autor en su primer apartado plantea el objetivo de la cita de Einstein, “la ciencia como fin que debe ser perseguido es algo tan subjetivo y condicionado psicológicamente como cualquier otro aspecto del esfuerzo humano, de modo que la pregunta ¿cuál es el objetivo y el significado de la ciencia? Recibe respuestas diferentes en diferentes épocas y en diferentes grupos de personas”. Esta cita -según Carballo- nos permite acercarnos al conocimiento a través de la comprensión de la Naturaleza, lo que puede propiciar sentimientos de prepotencia y egocentrismo.

En el segundo apartado liga el concepto de progreso con libertad como “leit motiv” de la ciencia, lo que lleva a la conclusión de que dentro de la ciencia no debería haber influencias ideológicas debido al dinamismo histórico. Es de destacar la dualidad que muestra en este segundo apartado, entre ciencia y vida. Por lo que respecta al tercer apartado –ciencia y concepción del mundo- dicha idea no es similar al de la ciencia positiva pero sí un factor configurador de las concepciones del mundo, nutrida de ideas ya vigentes. En el siguiente apartado nos cita a Schumpeter para señalar la relación entre la ideología y el método, la cual la primera complementa al proceso del conocimiento.

El quinto y último apartado se dedica a enumerar las cuatro etapas de la metodología científica (descripción, clasificación, explicación y verificación) para las cuales el investigador debe tener las cualidades de espíritu de observación, fantasía creadora, habilidad formalizadora y además ser consciente de su ignorancia y ansiar la búsqueda de la verdad.

En lo que se refiere al análisis del método científico el autor cita varias etapas por las que pasa toda investigación. En la primera es el acto cognoscitivo pre-analítico precedido de la observación continua de los hechos y de la realidad donde se procure clasificar los elementos de la realidad. Así pues daríamos paso a la concretización de la hipótesis anteriormente formulada para conducir al investigador hasta una tesis más formal. Sin embargo, en esta etapa la investigación nada más que tendrá un carácter provisional. En la siguiente etapa, la cuarta, se explicará la realidad superando el filtro de la contrastación intersubjetiva comunicándoselo a la comunidad con un lenguaje apropiado, señalándole las premisas y conclusiones. Finalmente en las últimas etapas, y recurriendo a Marx, se afirma la diferenciación del método de la investigación y del método de exposición.

miércoles, 18 de enero de 2012

Lectura nº 5 Gino Longo

Gino Longo nos plantea la metodología empleada en la investigación, la cual se inicia a través de la observación de los hechos, algo que por sí mismo explica poco lo que obliga a extraer lo que hay detrás de cada fenómeno, las relaciones entre sí y las evidencias más sustanciales de los mismos. Una vez realizado dicho mecanismo del proceso de observación habrá que encajarlos esquemáticamente (lo que Schumpenter denomina “visión” de acuerdo) para que las lagunas que se produzcan queden rellenas de supuestos hipotéticos.

Tras este primer proceso Gino Longo propone formular una hipótesis que permita explicar los hechos de manera coherente. Para poder llevar a cabo este proceso, Longo recurre a pensadores tales como Schumpenter, Lenin o Gramsci, proponiendo que el investigador/a utilice su propia “fantasía recreadora” que le permita crear mentalmente supuestos que le ayuden a comprender, a conocer y a modificar la realidad.

La siguiente fase consistiría en volver a observar los hechos, pero ahora con la ventaja de ya elaborada una fase previa, la hipótesis creada en los pasos anteriores. Para ello el autor nos advierte de mantener un espíritu crítico. Con ello pasaríamos a la última fase, la que con la anterior nos ayuda a sacar una conclusión de toda la investigación.

Es importante el carácter que Gino Longo saca en el texto, en el cual el patrimonio cognosciti-vo de la investigación pertenece a la humanidad, es decir, el conjunto de decisiones finales de un individuo ha sido enriquecido de propuestas anteriores. Esto hace que dicha metodología no haga sino complementar propuestas anteriores -sin eliminarlas- ya que los conceptos sociales no son estáticos, evolucionan.

Finalmente el autor concluye con que toda ciencia, con un objeto y método de investigación concreta, constituye una visión científica de la realidad, punto de unión entre la compresión y la práctica. Esta visión científica de la realidad compuesta de hechos y sucesos comprobados, y de los que integran hechos aislados, provocan un conjunto coherente que forma parte del nuevo esquema exacto de la realidad.

martes, 17 de enero de 2012

Resumen sesión Tráfico de armas

Ayer 16 de enero un grupo de compañeros y compañeras de clase expuso la temática del tráfico de armas. Señalaron algunos de los factores que incentivan este hecho: crecientes número de estados, aumento de conflictos, la tensión internacional o la aceleración del progresos tecnológico. Sin embargo no se olvidaron de señalar que lo que motiva principalmente este hecho son la corrupción, intereses…

Entre los Estados con mayor tráfico ilegal de armas -señalaron- donde más proli-feran son en Colombia (FARC) y en EE.UU., algo que no es de extrañar ya que el estado oficial de Colombia es uno de los que más se arma, lo que hace que la guerrilla tenga que rearmarse continuamente. En el caso de los USA, quizás el motivo principal lo veamos en el marco regulatorio que lo contextualiza, ya que permite el acceso libre al material de armas de menor alcance, cuanto menos.

No se olvidaron de mostrarnos algunas de las voluntades que a nivel internacional existen para disolver dicho comercio, Tratado sobre el comercio de armas de la Organización de las Naciones Unidas del 2012. Texto al que al igual que su predecesores pinta que se quedará sobre papel mojado, máxime cuando su Consejo de Seguridad consta entre los mayores vendedores de armas (Estados Unidos o Rusia).

El hecho de que exista tal comercio hace que se produzca una situación estructural que afecte principalmente a los países en vías de desarrollo -productores ya de armas- Este mercado supone 15 veces más del dinero que al que se destina para ayuda humanitaria.

Finalmente nos mostraron algunas de las consecuencias que se vienen produ-ciendo después de más de un siglo de este tipo de industrias:

  1. Efectos económicos: Costes de oportunidad que implican menor gasto pú-blico. Carrera armamentística, es decir, mayor gasto militar.
  2. Efectos sociales: menor gasto social.
Entre las conclusiones del grupo está la certera opinión que dicho fin de este tipo de prácticas se encuentra en las manos de los países más ricos.

SWEEZY - Teoría del desarrollo capitalista

Realizado por: Andrea Humbrías Aymerich, Borja Romero, Alfonso Jiménez Díaz y José Manuel Chamorro Godoy.

EL MÉTODO DE MARX.

Marx era un resuelto partidario del método “abstracto deductivo”. Aceptaba y practicaba lo que los teóricos modernos han llamado el método de las “aproximaciones sucesivas”, que consiste en avanzar paso a paso de lo más abstracto a lo más completo, eliminando suposiciones simplificantes en las etapa sucesivas de la investigación, de modo que la teoría pueda tomar en cuenta y explicar una esfera cada vez más vasta de fenómenos reales.

Hay una serie de diferencias entre Marx y los representantes de la tradición clásica y neoclásica. El principio de la abstracciones es por sí mismo incapaz de rendir conocimiento. Por eso uno debe decidir de qué hacer abstracción y de qué no hacerla. Surgen así dos cuestiones:

¿QUÉ PROBLEMA SE EXAMINA? Y CUÁLES SON
LOS ELEMENTOS ESENCIALES DEL PROBLEMA?

Si tenemos la respuesta a ambas preguntas sabremos seguramente de qué no nos podemos separar, enmarcando nuestras suposiciones de forma sencilla. Uno puede hacer abstracción de una diferencia que otro esté tratando de explicar, y, sin embargo, cada uno puede tener razón desde el punto de vista del problema que estudia.

Marx es radicalmente distinto del de las escuelas de pensamiento no marxista, ya que “pone al desnudo la ley económica del movimiento de la sociedad moderna”.

Poner de relieve lo esencial y hacer posible su análisis: ésa es la tarea específica de la abstracción.
La principal preocupación de Marx era la sociedad en su conjunto, y muy especialmente el proceso del cambio social. Intentaba más bien poner al descubierto la verdadera interrelación de los factores económicos y no económicos en el conjunto de la existencia social.
Una vez alcanzada la conclusión de que la clave del cambio social se encuentra en el modo de producción capitalista.

Marx, rebuscando entre los pensamientos de Hegel, concretamente en los pensamientos que enfatizaban en el proceso de cambio y desarrollo a través del conflicto entre fuerzas antagónicas. Marx se da cuenta así de la lucha de clase.

A diferencia de Hegel, sin embargo siguió los conflictos históricos decisivos hasta sus raíces en el modo de producción, esto es lo que él llamó materialismo histórico.

“La sociedad en su conjunto se divide cada vez más en dos campos hostiles, en dos grandes clases que se enfrentan: la burguesía y el proletariado”. El estudio se basará en dos pasos:

Primero, todas las relaciones, exceptuando la de capital y trabajo, hay que suponerlas provisionalmente alejadas, para reintroducirlas, una por una, sólo en una etapa posterior del análisis.

Segundo, la relación capital-trabajo debe reducirse a su forma más importante:

“Las mercancías”: Todo lo que habitualmente se destina al cambio más bien que a uso directo, es una mercancía; El análisis de las mercancías, implica el análisis de la relación del cambio y su aspecto cuantitativo; el dinero y el beneficio.

.Para Marx, la realidad social es el proceso de cambio inherente a un juego de relaciones El proceso de cambio en la historia es el producto de la acción humana.

El ser humano hace su historia, el cambio histórico siempre se da en circunstancias concretas. Así pues, la sociedad cambia y puede ser cambiada.

Actualmente, la mayoría de la gente no ve alternativa al capitalismo. Se puede decir que el pensamiento único se puede traducir en: Capitalismo o Muerte.

EL PROBLEMA DEL VALOR CUALITATIVO.

Toda mercancía tiene un valor de uso y un valor de cambio.

El valor de uso expresa cierta relación entre el consumidor y el objeto consumido. Las categorías de la economía política deben ser categorías sociales, pasando así las mercancías de tener un valor de uso a tener un valor de cambio.

Poseyendo las mercancías un valor de cambio, las mercancías exhiben su característica única en relación con las otras. En una sociedad en que el cambio es un método regular de realizar el propósito de la producción social, es sólo en calidad de mercancías como los productos tienen valor de cambio.

El valor de cambio aparece como una relación cuantitativa entre cosas, entre las mercancías mismas. La relación cuantitativa entre cosas, que llamamos valor de cambio es, en realidad, sólo una forma exterior de la relación social entre los propietarios de mercancías.

El cambio de mercancías es un cambio de los productos del trabajo de productos individuales. Las mercancías que se tratan son productos del trabajo humano en una sociedad basada en la división del trabajo, en la que los productos trabajan privada e independientemente.

Una mercancía es un rasgo universal de la existencia humana, presente en cada una y en todas las formas de sociedad. Como valor, una mercancía es un rasgo de una forma histórica específica de sociedad que se distingue por dos características principales: 1) La división del trabajo desarrollada y 2) producción privada.

Marx identifica el trabajo como la sustancia del valor.

El trabajo también tiene dos aspectos, uno correspondiente al valor del uso y el otro al valor de la mercancía que produce.

Podemos resumir la relación cualitativa del valor con el trabajo en la siguiente información: “Todo trabajo es gasto de fuerza, y en su carácter de trabajo humano abstracto idéntico, crea y forma los valores de las mercancías. Por otra parte, todo trabajo es el gasto de fuerza humana de trabajo en una forma especial y con un fin preciso, y en éste, su carácter de trabajo útil concreto, produce valores de uso.

El trabajo abstracto es abstracto sólo en el sentido completamente recto de que se pasan por alto todas las características especiales que distinguen una clase de trabajo de otra.
La sociedad capitalista se caracteriza por un grado de movilidad del trabajo mucho mayor que el que prevalecía en cualquier forma anterior de la sociedad.

El trabajo no es sino el resultado de una suma concreta de diferentes clases de trabajo. La indiferencia hacia la clase particular de trabajo corresponde a una forma de sociedad en la que los individuos pasan fácilmente de una clase de trabajo a otra. El trabajo se ha convertido aquí en un medio de crear riqueza en general y ha dejado de desarrollarse junto con el individuo en un sentido particular.

La reducción de todo trabajo a trabajo abstracto permite ver claramente una suma de fuerza de trabajo social que es susceptible de transferencia de un uso a otro de acuerdo con la necesidad social, y de cuya magnitud y desarrollo depende en última instancia la capacidad productora de riqueza de la sociedad.

El trabajo abstracto es la sustancia del valor. La mercancía tiene en común con todas las demás mercancías el hecho de absorber una parte del total de la fuerza del trabajo disponible en la sociedad.

Marx decía que “la magnitud del valor expresa… la conexión que existe entre cierto artículo y la parte del tiempo total de trabajo de la sociedad que se requiere para producirlo”.

En la producción de mercancías la relación básica entre los hombres “adopta, a sus ojos, la fantástica forma de una relación entre las cosas”. Esta materialización de las relaciones sociales es el corazón y la médula de la doctrina del Fetichismo, de Marx.

En períodos anteriores de la historia, cuando las relaciones de producción tenía un carácter personal directo, tal materialización de las relaciones sociales era evidentemente imposible.
El mundo se rige por un estado de la sociedad en que el proceso de producción tiene dominio sobre el hombre en lugar de ser controlado por él.

La aplicación de las ideas y los métodos de la ciencia natural a la sociedad es uno de los rasgos más notables del período capitalista.

La materialización de las relaciones sociales ha ejercido una profunda influencia e el pensamiento económico tradicional, por lo menos en otros dos sentidos importantes. En primer lugar, las categorías de la economía capitalista han sido consideradas como si fueran las inevitables categorías de la vida económica en general. Los sistemas económicos anteriores han sido vistos como versiones imperfectas o embrionarias del capitalismo moderno y juzgadas en consecuencia. En segundo lugar, la atribución de poder independiente a las cosas no es en ninguna parte más clara que en la división tradicional de los “factores de producción” en tierra, trabajo y capital, de cada uno de los cuales se piensa que “produce” un ingreso a sus propietarios.

La forma de producción de mercancías constituye el velo más eficaz posible para ocultar el verdadero carácter de clase de la sociedad capitalista.

El desarrollo de la producción de mercancías bajo las condiciones del capitalismo exhibe, por una parte, una intensa racionalización de sus procesos parciales y, por otra, una creciente irracionalidad del funcionamiento de sistema como un todo. Es claro que nos encontramos aquí con una de las mayores contradicciones del régimen capitalista. Un sistema social que tiene dominio sobre el hombre, lo educa hasta un punto en que es capaz de controlar su propio destino. Al mismo tiempo, le impide advertir los medios de ejercer el poder que está a su alcance, y desvía de más en más sus energías por cauces puramente destructivos.

EL PROBLEMA DEL VALOR CUANTITATIVO.

Marx estableció la teoría de la “ley del valor”, en la cual establece un equilibrio entre las proporciones del cambio de mercancías, la cantidad producida de cada una y la asignación de la fuerza de trabajo a las diferentes ramas de producción.

Esta teoría viene a demostrar que estos elementos se vienen a regular entre ellos de manera natural, con lo que de por sí existe un orden y no un caos que necesite una coordinación.

Para llegar a esta conclusión respecto de la teoría de la “ley del valor”, Marx hizo estudios en diferentes aspectos. Por ejemplo, en el primero de ellos analizó las relaciones económicas de las mercancías, con lo que estableció la “teoría del valor cuantitativo”, mediante la cual defendía la tesis de que existía una correspondencia exacta entre las proporciones del cambio y las proporciones del tiempo de trabajo. En este punto hay que hacer dos matizaciones, primeramente hay que relacionar el tiempo de trabajo con la noción de trabajo socialmente necesario, es decir, “el que se requiere para producir un artículo en las condiciones normales de producción y con el grado medio de habilidad e intensidad comunes en un momento dado”. La segunda matización es la consideración para todos los efectos del trabajo como trabajo simple, incluyendo también el trabajo calificado, que aunque existen diferencias teóricas entre estos dos trabajos, Marx considera de importancia la dificultad de distinguirlas en la práctica, con lo que reduce las dos concepciones en trabajo simple.

Igualmente Marx estableció una correspondencia entre el tiempo de trabajo y el precio de las mercancías en el mercado, pero esta correlación fue razonadamente criticada puesto que choca frontalmente con las reglas de la competencia, los sujetos si actúan libremente se rigen por la ley de la oferta y la demanda enunciada por Adam Smith, ya que los ofertantes no estipulan el precio de sus productos según el tiempo de trabajo empleado sino el precio que establece de por sí el mercado, ya que si no perjudicaría sus intereses.

En relación con la ley de la oferta y la demanda enunciada por Adam Smith, Marx hace una aportación muy importante en referencia al papel que juega la demanda, ya que según la teoría de Adam Smith el papel de la demanda podría simplificarse a la función que desempeña en el mercado como correlativa de la oferta y viceversa; pero Marx alude al hecho de que hay otros factores a tener en cuenta dentro de esta concepción, ya que en el papel de la demanda también actúa el capital que tenga ésta para gastar en el mercado que es condicionada por salarios retribuidos en sus respectivos trabajos. Con ello la curva de la demanda se equilibra según sean las condiciones de los factores mencionados, no únicamente según sea la curva de la oferta.
La “teoría del valor” de Marx expuesta es contraria a dos teorías en relación con el precio, a saber: “teoría del precio de producción” y “precio de monopolio”. Con lo que dejaría en duda la teoría aportada por Marx que rige en el precio, ya que estas dos concepciones no se ajustan a las condiciones de equilibrio en la teoría enunciada por Marx.

Antes de la aparición del Capitalismo, los sujetos tenían establecido un sistema de producción simple de mercancías, con lo que la cadena de producción era la siguiente: mercancía- dinero- mercancía (M-D-M). En cambio con la aparición del capitalismo, Marx distinguió de la anterior la cadena de producción de la siguiente manera: dinero- mercancía- dinero (D-M-D). Con lo que se podía observar que el Capitalismo consideraba el dinero, no como un medio, sino como un fin en sí mismo.

Asimismo, para el Capitalismo la fuerza de trabajo era considerada como una mercancía en las mismas condiciones de las demás, y era el elemento principal para la consecución de la plusvalía por el capitalista. La plusvalía no se conseguía por el proceso de circulación de mercancías ya que una variación en el precio desequilibraría en el mercado la curva de la oferta y la demanda en prejuicio del ofertante. Tampoco la plusvalía proviene de los materiales y maquinaria empleados en el proceso de producción. Por ello solamente nos queda la fuerza del trabajo como causante de la plusvalía, ya que Marx pone como caso que el trabajador en las 6 primeras horas de trabajo reembolsa los gastos que el capitalista tiene por él, pero en una jornada de 12 horas, las restantes 6 horas que el trabajador hace son un excedente de trabajo, y ello se traduce en una plusvalía de la que se beneficia el capitalista.

Con esta teoría enunciada por Marx, establece una fórmula básica:

C+V+P=VALOR TOTAL

De esta fórmula se derivan unas cuantas más que son utilizadas actualmente para los ejercicios de contabilidad en las empresas, como por ejemplo:

• La tasa de la plusvalía: la proporción de trabajo excedente con respecto al trabajo necesario, que Marx llama “tasa de explotación”. Esta tasa es directamente determinada por tres factores: la duración del día de trabajo, la cantidad de mercancías que entran en el salario real y la productividad de trabajo.

• La composición orgánica del capital: es una medida de la amplitud en que el trabajo es provisto de materiales, instrumentos y maquinaria en el proceso productivo, dicho de manera técnica, es una medida de la relación de capital constante con el capital variable, en el capital total usado en la producción.
• La tasa de la ganancia: es la proporción de la plusvalía con respecto al desembolso total de capital

Se ha podido observar que los factores que interactúan en las tres fórmulas son idénticos, con lo que según esta tesis para que esto se cumpliera todas las empresas e industrias debieran de ser iguales en todo su proceso de producción y en los elementos que participan en él. Por ello, la teoría aportada por Marx no es considerada válida para explicar el funcionamiento del sistema capitalista. De todos modos, aunque la “teoría del valor” no es válida en estos términos, ha contribuido positivamente en el estudio del sistema capitalista.

La economía política clásica (apoyada en la teoría de la población) predecía un fin del progreso económico. Un elevado número de habitantes incitado por el creciente proceso de acumulación llevaría a que todas las cosas necesarias para la vida tuvieran que producirse e implicaría un alza en el valor del trabajo (no en el salario real), un descenso de la ganancia respecto a la producción total y el sistema caería cuando el riesgo a asumir por el capitalista no se compensara con las ganancias. Esta teoría malthusiana murió cuando en la década de 1870 las tasas de natalidad cayeron en Europa.

El desarrollo de la teoría económica de Marx toma a las innovaciones y a los descubrimientos productivos como condiciones necesarias para la existencia del sistema capitalista. Ya que a través de estas nuevas tecnologías (que ahorran trabajo) es como se recluta al ejército de reserva y que este exista, es lo que hace que la plusvalía sobreviva y como consecuencia su clase (la burguesía).

En conclusión, los cambios en los métodos de producción llevan consigo un cambio en las relaciones sociales.

La mecanización del proceso productivo incitado por la acumulación, lleva a una mayor productividad en constante crecimiento, por lo que requiere un mayor desembolso del capitalista en materiales y maquinaria (composición orgánica del capital) esto llevó a Marx a formular la “ley de la tendencia descendente del capital” con la siguiente fórmula:

G= P´ (1-O)

De esta fórmula derivamos que si O tiende a crecer G tenderá a disminuir.

Lo que quiere decir, es que existen barreras para el desarrollo indefinido del capitalismo. La tendencia descendente de la tasa de ganancia pone límites al capitalismo. Y este se convierte en un modo histórico de producción limitado por sus condiciones materiales.

Existen seis causas por la que la “ley general de la tasas descendente de la ganancia” se convierte solo en una tendencia.

1. Abaratamiento de los elementos del capital constante. El uso continuo de la maquinaria al mismo tiempo que eleva la productividad del trabajo disminuye su valor por unidad del capital constante (se amortiza).

2. Aumento de la intensidad de explotación. Los capitalistas utilizan métodos como acelerar y estirar para compensar la tendencia descendente de la tasa de ganancia. Aceleran dejando menos tiempo al trabajo necesario y más al excedente para así aumentar la plusvalía. Estiran, prolongando la jornada de trabajo.

3. Depresión de los salarios más debajo de su valor. Intento de una constante reducción de los salarios por parte de los capitalistas.

4. Sobrepoblación relativa: El ejército de reserva tiende a presionar a la fuerza de trabajo activa así deprimiendo los salarios.

5. Comercio exterior. Hace posible adquirir materiales más baratos por lo que si se abarata el capital constante, la plusvalía aumenta.

PLUSVALÍA Y CAPITALISMO.

Hay una diferencia entre producción de mercancías en general y capitalismo.

En la producción, el productor tiene los medios con los que él mismo trabaja, bajo el capitalismo la propiedad de los medios y el trabajo realizado corresponden a grupos diferentes de individuos, asimismo, la fuerza de trabajo y los medios de producción en el capitalismo sirven como valor de cambio. En el capitalismo se la compra y venta de la fuerza de trabajo.

Otra de las diferencias que encontramos es la desigualdad en el circuito de transacciones realizadas en ambos sistemas, siendo M-D-M en la producción simple, en el que la mercancía final tiene un valor de cambio mayor, y Dinero- Mercancía- Dinero en el capitalismo, en el que la última cantidad de dinero es superior, el dinero se convierte en el objeto de toda la transacción. Este incremento de dinero es la plusvalía. La adquisición de la fuerza de trabajo, es decir, la adquisición del propio trabajador por cierto periodo de tiempo, se determina en función del valor de los medios de subsistencia que necesita el trabajador para su mantenimiento. Esto nos conduce al estudio de la plusvalía, la plusvalía se consigue debido a la combinación que realiza el trabajador de trabajo necesario y trabajo excedente, en el que el trabajo necesario es la manutención del trabajador y el trabajo excedente es la forma por la que el poseedor de los medios de producción se hace con la plusvalía.

LA ACUMULACIÓN Y EL EJÉRCITO DE RESERVA.

La producción se divide en dos amplios sectores: por un lado producción de medios de producción y por otro producción de artículos de consumo. Esta es la oferta total de mercancías.

Los ingresos están compuestos por tres categorías: ingresos que el empresario habrá de reinvertir en medios de producción, la plusvalía y el salario.

Considerándose la demanda de mercancías, para que el sistema capitalista tenga estabilidad, el capital constante utilizado debe ser igual a la producción total de los bienes de producción, por lo que el capital usado en la parte de artículos de consumo debe ser igual al valor total de las mercancías consumidas por los obreros y capitalistas dedicados a producir medios de producción. Ambos sectores deben interaccionar entre si de tal forma que las fuerzas sean equilibradas, cuando el capital variable y las plusvalías del primer sector sean iguales al capital constante del segundo, se establece un equilibrio entre la oferta y la demanda, “Reproducción constante”.

La realidad es bien diferente, y el empresario que gasta todos sus ingresos en mejorar sus instalaciones o en medios de producción se convierte en realidad en un empresario que acumula capital. El capital que acumula lo reinvierte para obtener más plusvalía, volver a invertirlo y así sucesivamente… este modelo es llamado de “Reproducción Ampliada”. El éxito en la sociedad capitalista consiste en hacer crecer el capital propio. En contraste con la “Reproducción Simple”, mostrando la interrelación entre oferta y demanda cuando la acumulación es tenida en consideración, es decir, cuando los capitalistas no consumen totalmente la “plusvalía”, sino que ésta es fraccionada en tres partes: una que consumen los capitalistas, otra que se añade al capital constante y otra que se suma al capital variable.
En consecuencia, la acumulación conlleva un aumento en la demanda de fuerza de trabajo. El aumento de demanda comporta un aumento en el precio de la mercancía, lo que produce una desviación del precio respecto de su valor. Si en el primer caso la fuerza de trabajo se vende a su valor, ahora ya no existe la igualdad entre fuerza de trabajo y los salarios.

Karl Marx introdujo el concepto de ejército industrial de reserva.

Su fundamentación es que con el desarrollo del capitalismo, la composición orgánica del capital aumenta, lo que se traduce en que la masa del capital constante crece más rápidamente que el capital variable. Además el capital se verá concentrado y centralizado en menos manos.

Siendo esta la tendencia histórica absoluta, parte de la población obrera devendrá sobrante frente a los requerimientos de la acumulación capitalista a lo largo del tiempo. Paradójicamente, cuanto más rica sea una sociedad, más amplio será su ejército industrial de reserva.

Sin embargo, al desarrollar el concepto Marx aclara que, dependiendo del estado de la economía, el ejército industrial de reserva (lo que también se denomina desempleo estructural) se expandirá o contraerá siendo absorbida o expulsada fuerza de trabajo de las masas valorizadas por el capital.

Es decir, el ejército de reserva se forma por las inevitables innovaciones tecnológicas que modernizan la industria y economizan el trabajo, y gracias a esta modernización la plusvalía aumenta, asegurando así los ingresos a la clase que soporta. A tenor de esto Sweezy destaca la equivoca idea de la suposición de que la introducción de las máquinas para ahorrar trabajo y la acumulación vayan a la misma velocidad, como para mantener un equilibrio entre los salarios y la plusvalía.

LA TENDENCIA DESCENDENTE DE LA TASA DE GANANCIA.

La acumulación de capital está ligada a la mecanización del proceso de producción. La misma cantidad de trabajo con un equipo mecánico más perfecto y eficiente obtiene una mayor producción. La productividad de trabajo crece constantemente, igual que la composición orgánica del capital. De ambos conceptos se desprende la ley de la tendencia descendente de la tasa de la ganancia.

Según Marx existen obstáculos internos que impiden el desarrollo indefinido de la producción capitalista. Una composición orgánica ascendente del capital es sinónimo de crecimiento productivo del trabajo. La tasa descendente de la ganancia que la acompaña tiene que cerrar los cauces de la iniciativa capitalista.

Al abaratar el capital constante, se aumenta la productividad del trabajo, y disminuye el valor por unidad de capital constante. Un aumento dado en la composición orgánica del capital, bajando el valor del capital constante, actúa como su propio correctivo. Con el aumento de la intensidad de explotación y el aumento de la jornada de trabajo, se aumenta la tasa de plusvalía.

La sobrepoblación de trabajadores parados conduce a la creación de nuevas industrias con una composición orgánica del capital baja y una tasa de ganancia alta, por lo que la tasa de la ganancia general asciende. El comercio exterior hace posible adquirir materias primas y mercancías más baratas elevando la tasa de ganancia, de plusvalía y reduciendo el salario.

Una característica que distingue al capitalismo es que el trabajo transformado en capital constante, compite con el trabajo vivo y frena las demandas de éste último. Suponer una tasa constante de plusvalía unida a la productividad ascendente del trabajo no tiene en cuenta este resultado. La composición orgánica del capital y la tasa de plusvalía son variables predecibles, mientras que la tasa de ganancia varía de una forma indeterminada. Debería considerarse que ambas variables tienen la misma importancia.

Por ello, la formulación de la ley de la tendencia descendente de la tasa de la ganancia no resulta exacta, ya es posible comprobar que existe una tendencia descendente de la tasa de ganancia si el análisis se inicia con la composición orgánica ascendente del capital.

La composición orgánica ascendente del capital implica el proceso de acumulación de capital, y se hace necesario encontrar qué fuerzas causan la caída de la tasa de ganancia. La acumulación de capital actúa aumentando la demanda de salarios, si los demás factores no cambian, la subida de los salarios conlleva una reducción de la tasa de plusvalía produciendo un descenso de la tasa de ganancia. Introduciendo maquinaria moderna se mantiene la tasa de ganancia. El aumento en la composición orgánica del capital restablecerá la tasa de plusvalía e incrementa el volumen de plusvalía por encima de lo que aumentaría sin ésta.

Existen otras fuerzas importantes en este proceso: sindicatos, la acción del Estado en beneficio de los trabajadores, las organizaciones patronales, la exportación del capital, los monopolios y la acción del Estado en beneficio del capital.

LA NATURALEZA DE LA CRISIS CAPITALISTA.

Marx no llegó a realizar un análisis completo sobre la naturaleza de la crisis capitalista.

Primero, en las condiciones de la producción de mercancías en el sistema capitalista, el sistema de transacciones se ha convertido en Dinero-Mercancía-Dinero, mercancía contra dinero y dinero contra mercancía, por lo que el acto del cambio se divide en dos partes, la compra y la venta, en el que el uso de la moneda es clave, puesto que es homogénea y permite posponer tanto el acto de compra como el de venta. Al poder posponer o interrumpir este intercambio, se puede iniciar un proceso que afecte a toda la economía, la cual necesita de este circuito en constante movimiento: producción-consumo. Si este circuito se interrumpe se produciría la sobreproducción, la cual podría provocar la crisis. Según la “ley de Soy": no puede interrumpirse la circulación M-D-M, y por lo tanto no puede haber crisis ni sobreproducción, ya que a una venta le sigue invariablemente una compra por igual cantidad. Marx dedicó a esta Ley una crítica en el momento en que Ricardo negaba la posibilidad de la sobreproducción. En la forma de circulación M-D-M propia del sistema de producción simple de mercancías, el propósito de cambio es el valor de uso y no el aumento del valor de cambio, es producción para el consumo.

Pero en la forma D-M-D, las dos “D” representan valor de cambio, y el objetivo es incrementar ese valor, hay que tener en cuenta que el interés del capitalista es elevar sus beneficios. La circulación de transacciones del capitalismo se realiza para la expansión del valor del dinero, obteniendo al final una mayor cantidad tras el proceso. Pero esta circunstancia solo se da para el productor capitalista, no para los trabajadores, que venden su fuerza de trabajo para conseguir mercancías que garanticen su subsistencia. Si el productor capitalista advierte que el incremento de capital no va lo esperado, no dudará en retirar su capital de la circulación, al menos durante un tiempo. Si el incremento del capital desaparece o se vuelve negativo, el capital será retirado, se reducirá la circulación del dinero y comenzará una crisis. Si el incremento del capital no es tanto como se esperaba, se reducirán sus acciones. Puede ocurrir que se retire el dinero del mercado, pero si el capitalista desea seguir siéndolo, deberá reinvertirlo. En el caso de que la crisis ocurra en tan solo una industria, el capital se moverá hacia otras, pero en el caso de que sea una crisis generalizada se tendrá que posponer la reinversión hasta que aparezca un momento más favorable. Ahora bien, la posibilidad formal de la crisis no hay diferencia entre la producción simple de mercancías y el capitalismo, porque las interrupciones de compra-venta afectan al proceso en los dos casos. La diferencia está en que puede desaparecer la tasa de ganancia o volverse negativa, por lo que el incentivo de la producción capitalista dejaría de existir. También podría ocurrir, un descenso en dicha tasa y que los capitalistas redujeran sus operaciones lo bastante como para producir una crisis. En esos momentos, el capitalista debería elegir entre, introducir capital en el circuito o conservarlo, aunque pronto tendría que reinvertirlo para continuar siendo un capitalista. Lo que puede suceder, es que ese aplazamiento del capital puede haber producido ya una interrupción y provocado la sobreproducción y la crisis, pero hay que decir, que no es verdad que la tasa de ganancia deba desaparecer o volverse negativa para producir una crisis; sólo con el descenso de ella puede ser suficiente para interrumpir el proceso de la circulación y que dé lugar a una crisis. Se puede afirmar, que existen dos tipos de crisis: las relacionadas con la tendencia descendente de la tasa de la ganancia y la crisis de realización (realización de valor). Desde una perspectiva causal, los dos tipos plantean problemas diversos: en un caso tiene que ver con movimientos en la tasa de la plusvalía y en la composición del capital, quedando intacto el sistema de valor; y en el otro, tiene que ver con fuerzas todavía no especificadas que tienden a crear un déficit general en la demanda de mercancías, en el sentido de ser insuficientes para comprarlas todas con una tasa de ganancia satisfactoria. El punto de partida en ambos los casos, es un descenso en la tasa de la ganancia; pero lo que está detrás del descenso en la tasa de ganancia, precisa un análisis muy diferente del que requiere lo que está detrás del descenso en la tasa de ganancia en el otro.

miércoles, 11 de enero de 2012

"Qué es una concepción del mundo". F. Engels


Qué es una concepción del mundo pasa por ser un análisis de los principios que dan razón a la conducta de un sujeto. Rechaza la tesis positivista, la cual pretende conocer el mundo a través de la ciencia, debido a que son distintas las afectaciones que rodean a un sujeto. Principalmente porque lo que le determinan son factores como el contexto, el nivel económico, las relaciones sociales...

Por tanto el otro camino que nos despeja el autor y que podíamos nombrar como complementaria a la anterior es la “materialista y didáctica del mundo”, la cual establece acabar con aquello que nubla la consciencia, si entendemos tal como el fin de terminar con los “factores no reconocidos”.

Este materialismo es lo que conocemos como uno de los principios de la “concepción comunista del mundo”, inspirada en las limitaciones del hacer científico-positivo y que hace de él un nivel más del pensamiento científico, lo que le permite investigar y reflexionar sobre sus resultados.

martes, 3 de enero de 2012

Música y realidad social: CAPITALISMO

Los motivos por los cuales he escogido esta canción son dos. El primero porque al tener que elegir un tema que tenga que ver con la asignatura, que mejor uno que tenga que ver con el actual “sistema económico mundial” -al menos imperante-, el Capitalismo, del grupo Urban 69. Y el segundo y no menos importante, es porque el tema me gusta bastante, ya que me identifico con lo que quiere decir, y en especial porque me siento unido a dicho grupo ya que es de mi barrio y porque las letras están hechas por personas que viven -quiero decir, padecen- en sus propias carnes las consecuencias de dicho sistema político y socioeconómico.

Por ello que mejor que pasar a analizar las estrofas de dicho tema